Una llamada para avisar sobre el uso no autorizado de una tarjeta bancaria podría significar el inicio de una estafa
Ante tanta información sobre fraudes financieros, puede ser que cada vez que entregas tu tarjeta de crédito al hacer una compra tomes las debidas precauciones contra la clonación de tu plástico. Sin embargo, recibir una llamada para avisarte sobre cargos no autorizados a tu tarjeta bancaria podría resultarte sorprendente y buen método para advertir a los tarjetahabientes.
El problema está en que quien te llama te da un número telefónico para corroborar tus datos, marcas y una grabación te pide que digites tu número de tarjeta, fecha de vencimiento y NIP, no sabes que podrías ser víctima de una nueva modalidad de fraude conocida como ‘vishing’, un término que combina ‘voz' y ‘phishing' (robo de datos).
En un comunicado, la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), advirtió que la práctica consiste en un protocolo de voz e ingeniería social para obtener información de una persona que pudiera ser defraudada. En el ‘vishing’ los delincuentes utilizan un sistema de mensajes pregrabados o una persona que llama para solicitar, en muchos casos, información financiera personal.
La Condusef advierte que si recibes una llamada de organizaciones como "Comité de promociones Visa-MasterCard" o supuestas "advertencias" en las que aparentemente informan que tu tarjeta está siendo utilizada de forma fraudulenta, debes consultar primero a tu banco para verificar la autenticidad de la llamada.
Tanto VISA como MasterCard, destaca la dependencia, no envían correos ni realizan llamadas telefónicas solicitando números de tarjeta, ni confirmación o actualización de datos.
Guía para evitar un fraude
En 2010 se cometieron fraudes a chequeras y tarjetas de crédito por más de mil millones de pesos. Estos son unos consejos para no ser una estadística más:
1. Primero lo primero. Observa reglas de seguridad básica: la mejor manera de proteger tu chequera y tarjetas es cuidándote a ti mismo. Ten cuidado al usar cajeros automáticos. Si algo no te “late” (por más ridículo que parezca) no lo hagas.
2. Revisa tus cuentas: Si no llevas un estricto control de tus gastos es difícil y tardado que te percates de algún fraude. Guarda vouchers y revisa religiosamente estados de cuenta de tarjetas y chequeras. Si tienes dudas, habla al banco y acláralas de inmediato.
3. Lo más sencillo es lo más común. La mayor parte de los fraudes se realizan de la manera más simple: te roban la tarjeta o chequera, falsifican tu firma y te lo devuelven antes de que te des cuenta. Evita tener demasiadas tarjetas o chequeras (no sólo es inseguro, es poco recomendable para una buena planeación financiera). Nunca los lleves a donde no los vas a utilizar: llevarlos “por si acaso” aumenta el riesgo de extravíos o robos. No pierdas de vista tu bolso; si guardas la cartera o la chequera en el compartimiento interior de un saco o chamarra no lo dejes en el guardarropa.
Cuida los cheques individuales. Muchas veces los ladrones arrancan un cheque (con todo y recibo) para que no te alertes de su falta. Verifica la numeración consecutiva de tus cheques.
Guarda bajo llave los instrumentos de acceso a los portales bancarios (tarjetas multinuméricas y dispositivos automáticos).
4. Son secretos: Memoriza tus números confidenciales (passwords, claves o NIP) y jamás los compartas con nadie. Cambia regularmente tus claves y evita tener la misma para todas sus contraseñas. JAMÁS proporciones tus contraseñas o claves de usuario por Facebook, Twitter, correo electrónico o mensaje, aun cuando pienses que sólo las va a leer el destinanatrio.
5. Siempre alerta: Cuando pagues con tarjeta de crédito, nunca la pierdas de vista (ya hay terminales portátiles que llevan a tu mesa). Si se la llevan para cobrarte, mide el tiempo y presiona para que te la devuelvan a la brevedad.
6. Ojo, mucho ojo. Nunca des tus datos y números a gente que te ofrezca premios o promociones telefónicas por más atractivas que suenen. NINGÚN banco o institucion financiera te solicitará informacion por mail. Si habla un “empleado del banco” solicitando datos, verifica que su puesto e intención sean correctas.
7. Desconfía primero. Cualquier promoción, premio o sorteo ganado al que te hagas acreedor y se vea demasiado bueno para ser verdad, probablemente no lo sea. Incluso aunque el mail sea de una imagen idéntica a la de tu banco.
8. Ni un minuto que perder. Ten a la mano (en varios lugares) los teléfonos del banco o empresa emisora para reportar robos o problemas. Si sospechas de una tranza actúa rápido para poder prevenir o minimizar el daño que se pueda ocasionar. Actúa primero, pregunta después.
9. Estar Informado. Averigua las políticas y los servicios que tiene tu banco en caso de que la pérdida o robo ¿qué es lo que debes de hacer? ¿a dónde te debes dirigir? ¿Existe algún seguro?
Seguridad online
Las compras y transacciones bancarias en línea, cada vez son más populares. Sin embargo, son un campo vulnerable por los problemas de seguridad en las redes informáticas y por la falta de legislación para combatir este tipo de fraudes. Si usas tu computadora para hacer pagos y transferencias ten especial cuidado:
Protege tu computadora: Evita a toda costa la entrada de virus que pueden dañar o robar tu información. Compra un buen antivirus y un firewall, actualízalos constantemente.
Sé muy selectivo: Evita al máximo hacer transacciones en computadoras públicas y en sitios que no protejan tu seguridad. Asegúrate de que tu buscador sostenga transacciones seguras.
Despídete bien. No olvides salir de la manera adecuada del sitio de internet, no apagues la computadora sin desconectarte de la página (logout).